Ya hemos recogido y saboreado el fruto de lo sembrado hace meses. Poco a poco se nos fue haciendo la boca agua hasta que el viernes se convirtió en el gran día. Muy pocos hubieran dado algo por asegurar que nos íbamos a juntar hasta 13 excompañeros de Gijón (y Cheste) y pocas veces este fatídico número había sido más agradable. En verdad ha sido un fin de semana emocionante. Es curioso cómo al poco de estar charlando y comentando cosas del pasado y del presente, parecía que el lapso de 30 años hubiera sido de apenas unos meses, como si hubiéramos ido a la mili y vuelto a vernos. Y también es curioso comprobar cómo todos (aunque algunos no tanto) hemos cambiado tanto como para tener dificultades de reconocernos si nos hubiéramos visto casualmente, pero al momento reconocemos a los demás en los gestos, el discurso, la manera de ser... O sea, que salimos de la Laboral ya hechos, con poco por modelar.
Por otro lado, la organización (Pepe, Juanvi...) muy bien. La visita a la universidad agradable (si no fuera por las obras), Ca'Suncia muy cambiado (todo Somió, en realidad) y el ritmo algo ajetreado para nuestra edad y falta de costumbre. Los empalmes ya no son lo que eran. Estamos ya en la época en que los placeres se centran un palmo más arriba que antes y sólo damos capricho a la andorga. Hemos comido un besugo formidable, un bacalao al pil-pil impresionante (gracias al cocinero de la peña), un pitu de caleya pasable, unas mantecosas fabes... todo ello regado con la mejor sidriña y buenos caldos de la Ribera del Duero, de la Rioja y de Galicia. Ahora habrá que dedicar una semana a dieta, aunque algunos necesitamos más de un mes, porque las cosas se acumulan año a año.
Bueno, ahora hay que mantener un mínimo ritmo (seguro que Paco se encarga de alimentarle) para mantener el fuego hasta la próxima cita, sobre la que debemos ir decidiendo cuestiones como fecha, lugar, duración, estilo...
Roguemos a Pepe encarecidamente que traslade a sus correligionarios nuestro agradecimiento por la hospitalidad y atención en la noche del sábado. Y reiteremos a los organizadores y otros artífices las gracias porque esto que tan bien ha nacido (¿resucitado?) no puede languidecer.
Podéis ver un primer lote de fotos (esperemos que haya más) AQUÍ.
Un saludo,
Félix
1 comentario:
Bien empiezas, Berodia, hemos recogido lo que hemos sembrado durante meses, hemos sembrado recuerdos de juventud y hemos recogido la cosecha de la amistad. Ahora empieza otro año de siembra, donde debemos preparar la tierra, abonarla, arar los malos momentos que seguro pueden salir en cuanto a falta de interés, porque esto puede ser como los novios : cuando cortejas todo va bien pero luego cuando uno cree que ya se convierte en monotonia la relacion el interés decae.
Por ello el noviazgo de la PMC no debe acabar en matrimonio y asi tener siempre ganas de mas. Va a ser difícil, cuando ya hemos conseguido la meta del reencuentro, mantener un ritmo elevado de contacto pero se debe intentar. Por ello creo que cualquier problema que surga en cualquiera de nosotros debemos contárnoslo y si se puede ayudar pues en ello estamos.
SALUD y SUERTE
Paco
(Fecha original: 15 Julio 2007 a las 21:07)
Publicar un comentario