miércoles, 15 de enero de 2014

¿Esta es la iglesia que estamos pagando entre todos?

De vez en cuando, los representantes autorizados de la iglesia católica se salen del carril y expresan sus verdaderas convicciones medievales sobre temas de los demás. Ahora el párroco de El Burgo Ranero, Jesús Calvo, opina de Pedro Zerolo y la homosexualidad, tema del que, por cierto, los dirigentes católicos saben bastante. El presentador, ejemplo de liberal y demócrata donde los haya, le ayuda a encauzar el tema: siendo estrictamente católicos creen que el cáncer es el castigo por ser homosexual o 'basura', que no cambiaría la vida de su perro por la del político y que debería volver la pena capital, que es doctrina católica, para estas personas. Eso sí, todo desde el respeto, porque empiezan diciendo que sus discrepancias son políticas pero a nivel personal no le desea nada malo.
A todo esto, el obispado de León “lamenta” las palabras del sacerdote sobre Zerolo y le ordena no hablar de política, pero no lo sanciona. Atribuir el cáncer a “la divina providencia” o desear la reinstauración de la pena de muerte para acabar con “la basura social” no parece suficiente para que un sacerdote sea sancionado por sus superiores.
En algo aciertan: "cada día ladramos más".
Un saludo,
Félix

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