Nacho Diego resultó ser al final el que estando en la oposición pisoteaba los puros que Revilla dejaba en la calle, en la ventana del Parlamento, para terminarlos cuando saliera de nuevo si calculaba que habría un receso pronto o la sesión duraría poco tiempo.
Revilla salía bastante en la tele, y algunos le criticaban por eso. Ahora Nacho también sale en la tele, aunque la mayoría todavía no le conoce.
Cuando va a visitar a los trabajadores encerrados en la Sniace, en Torrelavega, alguno le pregunta que si "¿No te has reído ya bastante de nosotros?". A lo que el presidente responde...
Cuando va a visitar el hospital de Sierrallana, también en Torrelavega, no duda en quitar varios carteles en los que los trabajadores y defensores de la sanidad exhiben un "No al desmantelamiento de los Hospitales Comarcales".
Un saludo,
Félix
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